jueves, 16 de junio de 2016

Conductismo


Comenzaremos nuestra discusión mencionando las teorías más destacadas en el conductismo y como han sido aplicadas en la experiencia del autor como docente y estudiante. Sin embargo, enfatizamos el enfoque conductista como un aprendizaje demandado, operante y observacional (Burton, 2004). El autor hará un análisis de las ventajas y desventajas que posean estas teorías en el desarrollo conductual del individuo. Un aprendizaje con entrenamiento de respuestas tanto fisiológicas y emotivas fueron técnicas utilizadas por Ivan Pavlov y Thorndike en el condicionamiento clásico. Esto nos lleva a entender que la conducta puede ser condicionada por medio de la estructura que establece el instructor. Según la experiencia del autor, los primero dos meses de clase ha sido persistente en las reglas establecidas y discutidas desde el primer día con sus estudiantes. En consecuencia, el autor identifica la carencia de estructura en los hogares de alguno de sus estudiantes. Por consiguiente, se debe hacer énfasis a condicionar al estudiante a cumplir con las normas establecidas en el aula de clases. A tal modo que la respuesta del estudiante sea una favorable de gran beneficio a su vida como futuro ciudadano de orden. Es necesario recalcar que condicionar debe resultar de beneficio para el individuo más no de manipulación por otros.
Skinner (1920) en el condicionamiento operante desarrolló técnicas de modificación de conducta para la enseñanza, el aprendizaje de idiomas y tratamiento psicótico. Este teórico describe el conductismo como un movimiento de objetivos de comportamientos en la educación y describe al docente reforzador y organizador. De esta manera el alumno está condicionado a realizar el comportamiento esperado. La teoría de Skinner se basa entre un estímulo y una respuesta. Asimismo hace notar que no todas las respuestas del organismo se producen en presencia de un estímulo identificable. Por tal motivo, va a requerir de refuerzos positivos, negativos o castigo para el comportamiento deseado. El autor expresa que ante esto se requiere un balance entre los refuerzos provistos. La población estudiantil es muy diversa para aplicar estrategias de corrección a su comportamiento sin llegar a la mucha flexibilidad o irritabilidad. Basada en la experiencia del autor, ha identificado docentes que desconocen el manejo de estudiantes que evidencia un diagnóstico de Trastorno Oposicional Desafiante. Estos educadores se enfrentan a estudiantes que tienen problemas en su control emocional o tienden a ser impulsivos. Por lo tanto, no tienen las herramientas para manejar incidentes que llegan a la violencia verbal y en ocasiones físicamente. Los docentes suelen utilizar el método correctivo para todos por igual aun conociendo los indicadores emocionales que tienen algunos estudiantes.
Albert Bandura (1987) basa su teoría en los comportamientos provocados mediante la observación de la conducta de otros. Esta teoría tiene sus ventajas y desventajas en el aprendizaje. Para el autor, los estudiantes suele identificar una persona que lleva toda su admiración. En muchos casos, las personas no son las mejores indicadas para ser un modelo a seguir. Actualmente, hay comunidades que identifican como su líder al encargado del punto en el residencial. El autor en su experiencia ha escuchado de la boca de sus estudiantes reconocer a estos individuos como ídolos o héroes. En una posición así, el autor como docente, debe dar a conocer las consecuencias adquiridas ante este tipo de funciones ilegales. Los docentes no debe perder de perspectivas la implantación de los valores en sus salones de clases. La actitud no debe ser señaladora sino educar para modificar pensamientos. De hecho, la presión de grupo es otro factor de gran influencia en el comportamiento. Los estudiantes desean imitar al líder estimulando su comportamiento hacia otros fines. Podríamos indicar que positivamente el estudiante debe conocer a sus líderes escolares como modelos a seguir. De igual manera reconocer su esfuerzo para alcanzar las metas propuestas. Así como un líder activo que involucra a los alumnos en actividades educativas y posee grandes habilidades que son funcionales en la comunidad escolar.
Para añadir a la discusión, Benjamín Bloom y sus colegas (1948) en Chicago y Michigan elaboraron un marco teórico para estandarizar las características del comportamiento humano. Se origina una taxonomía con los siguientes dominios: conceptual, procedimental y actitudinal. Robert Gagné (1972) utilizó también unos dominios similares. El Departamento de Educación de Puerto Rico utiliza esta taxonomía para la elaboración de la planificación diaria del docente. El autor reconoce la efectividad de la taxonomía según los objetivos que establece el docente y el desarrollo de las actividades. No obstante, muchas actividades se han vuelto una rutina poco dinámicas que han afectado el interés estudiantil en las destrezas académicas. Muy bien destacó Bloom la falta de objetivos claros en la educación para su aplicación en materiales y procedimientos. Es decir, clases con actividades que requiere llenar pizarras y escribir en libreta. Los estudiantes en estos tiempos son espectadores de grandes avances tecnológicos y diversidad de métodos educativos. Conviene indicar que los docentes deben prepararse a implementar en sus actividades estrategias de enseñanza que los lleven a cumplir sus objetivos de manera dinámica y tecnológica.

Referencias


Bandura, A. (1987). Pensamiento y acción: Fundamentos sociales. Barcelona: Martínez Roca.
Bloom, B. S. (1990). Taxonomía de los objetivos de la educación: La clasificación de las metas educacionales: Manuales I y II. Buenos Aires: El Ateneo.
Burton, J. K., Moore, D. M. & Magliaro, S. G. (2004). Behaviorism and instructional technology. En D. H. Jonassen (Ed.), Handbook of research on educational communications and technology (pp. 3-36). Mahwah, NJ, EE.UU: Lawrence Erlbaum Associates
Jonassen, D. H. (2004). Handbook of research on educational communications and technology. Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum.
Seattler, P. (2004). The evolution of American educational technology. Greenwich, CT: Information Age Publishing. (pp. 55-93)
Skinner, R., Jr. (1968). A new format for ITV. Educational Technology Research and Development, 16(3), 287-293. doi:10.1007/11423.1556-6501
Wilson. B.G. (1997). Thoughts on theory in educational technology. Educational Tchnology, 37(1), 22-27.

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