jueves, 16 de junio de 2016

Tecnología dura, blanda y el Informe Horizon 2014



Tecnología dura
            Se realiza un análisis sobre las tecnologías duras haciendo referencias al capítulo 14 titulado, Educación a Distancia (Jonnasen, 2004).  La educación a distancia es el aprendizaje estructurado entre el estudiante y el instructor en espacios separados.  Ha surgido un crecimiento en la educación internacional con el uso de este método.  Las distintas plataformas que realizan la función de un aprendizaje a distancia han servido de gran herramienta para las Instituciones Educativas y Universidades que incorporan este medio tecnológico.  Se ha ampliado la accesibilidad a la educación desde otros países por medio de esta herramienta.  Los conceptos, tales como, el aprendizaje en red, conectados a espacios de aprendizaje o aprendizaje híbrido, le brindan al estudiante el alcance comunicativo.
            Muchos centros de estudios promocionan constantemente los nuevos programas con la integración a la educación a distancia.  Estos programas facilitan el tiempo que requieran las tareas y el manejo de las clases desde la comodidad de su hogar.  El autor como estudiante actual de un programa de educación a distancia le impresionó la plataforma Gototraining para la interacción en línea del curso.  Además, reconoce la organización y los criterios de evaluación de los cursos evidenciados en los prontuarios como guía del estudiante.  Estos programas son especialmente beneficiosos para las muchas personas que no están financieramente, físicamente o geográficamente capaz de obtener una educación tradicional.  A pesar de que hay un aumento en el número de servicios a distancia, la audiencia principal para estos cursos sigue siendo el adulto y la educación superior.
            Es importante destacar que los adultos profesionales poseen una carga laboral que les imposibilita ser parte de programas presenciales por los conflictos en sus horarios de trabajo.  La educación a distancia les permite organizar su tiempo de estudio atemperado a su necesidad en el tiempo disponible.  La educación a distancia es un concepto que abarca la actividad de enseñanza-aprendizaje en los dominios cognitivos, psicomotor y afectivos de una aprendiz en forma individualizada y una organización de apoyo.  Se caracteriza por la comunicación continua y pueden llevarse a cabo en cualquier lugar y en cualquier momento, lo que hace que sea atractivo para los adultos profesionales y con compromisos sociales (Holmberg, 1989 p.168).
            En algunos países, el objetivo de la educación a distancia como una alternativa a la educación tradicional, ha sido enfrentar el analfabetismo en los países en desarrollo.  De esta manera, proporcionar oportunidades de formación para el crecimiento económico y para ofrecer un currículo de gran enriquecimiento en los centros educativos no tradicionales.  El autor afirma la intervención efectiva que pueden tener estos programas para manejar la adquisición del lenguaje y la comunicación oral.  Feenberg y Bellman (1990) propusieron un modelo de factores sociales para examinar los entornos en las redes tecnológicas y su ambiente social desde el uso electrónico para estudiantes que trabajan en grupos.  Estos identificaron que a través de la mediación por los ordenadores de comunicación se intenta reducir los patrones de discriminación.  Asimismo, se proporciona la igualdad en la interacción social entre los participantes que se muestran anónimos en términos de género, raza o limitaciones físicas.  El autor expresa la importancia de este punto pues se mantiene el trato igualitario y la imparcialidad en los procesos de evaluación.  El instructor suele utilizar sus criterios de evaluación según el rendimiento en el aprendizaje demostrado por el estudiante.
            Aunque las primeras investigaciones se centraron en los estudios de comparación a los medios de comunicación en recientes investigaciones la educación a distancia ha  examinado cuatro temas principales:  necesidades de los estudiantes, medios de comunicación y el proceso de instrucción, problemas en el proceso de acción y los papeles cambiantes de los profesores y estudiantes (Sherry, 1996).  Estos estudios nos permiten comprender la efectividad en el aprendizaje a distancia que englobe distintas necesidades en el estudiante.  Cabe destacar, que se debe considerar el estudiante que carece del dominio al manejo tecnológico.  El autor expresa que su primera experiencia en la educación a distancia fue a nivel bachillerato.  En aquel momento la Universidad Interamericana de San Juan adiestró a los estudiantes y maestros para el manejo de la plataforma Blackboard.  Al comienzo ocurrieron muchos problemas con el contenido de los módulos y la entrega de trabajos.  Pero los técnicos fueron identificando las fallas que producía el sistema para un mejoramiento paulatino.  Para el autor, este programa fue frustrante por los problemas que tuvo con la plataforma y la poca comunicación del profesor con los estudiantes.  Esto debido al poco dominio del maestro para manejar la plataforma.
            Tu & McIsaac (2002) examinaron las dimensiones de la presencia social y la privacidad.  El factor de privacidad era importante en el mantenimiento de un nivel de comodidad para los estudiantes que trabajan en línea.  Según Peters (1983), el maestro no necesita enseñar de modo presencial, sino que debe proveer las instrucciones en su mejor comprensión y llegar a una gran cantidad de estudiantes.  El autor considera que establece un mejor enfoque en el material del curso cuando se encuentra haciendo los trabajos desde su hogar.  El estudiante a distancia debe tener la capacidad de organizarse y preparar su ambiente de trabajo libre de distractores.  De no cumplir con estas cualidades puede afectar adversamente su ejecución universitaria y el tiempo establecido para la entrega de trabajos.  Desmond Keegan (1980), identifica seis elementos clave en la educación a distancia:  (1) La separación de profesor y alumnos, (2) influencia de una organización educativa. (3) El uso de los medios de comunicación como enlace entre el profesor y el alumno.  (4) El intercambio bidireccional de la comunicación.  (5) Los alumnos como individuos en lugar de agrupados.  (6) La educación de forma industrializada
            Para culminar este tema, debemos identificar ciertas desventajas de la educación a distancia.  Según el capítulo 14 de Jonassen (2004), se realizó una investigación para identificar los factores que influyeron en el proceso del grupo a distancia.  Esto se realizó por medio de la participación de un grupo de enfoque entre México y los Estados Unidos.
 En este grupo ocurriendo las siguientes desventajas:  las formas de lenguaje utilizadas, la falta de comunicación entre estudiantes y maestro, las diferencias de género, colectivista frente a las tendencias individualistas, la percepción de conflicto y cómo gestionarlas, la presencia social, el periodo de tiempo que el grupo funciona y el nivel variable de habilidades tecnológicas. (p. 385)
Tecnología blanda
            El autor realiza un análisis sobre las tecnologías blandas utilizando como marco de referencia el capítulo 21 titulado, Juegos y simuladores y sus relaciones para el aprendizaje (Jonnasen, 2004).  Los juegos educativos y simuladores son ejercicios prácticos que permite al estudiante aprender a trasportarse a otro mundo.  Podemos utilizar estas herramientas para beneficiar su conocimiento, habilidades y estrategias en su ejecución académica.  Los juegos académicos son ejercicios competitivos donde su objetivo es ganar.  Esta acción suele ser las reglas del juego (incluyendo sanciones por acción ilegal) y puede realizarse de otras maneras como fichas, tarjetas, y las teclas del ordenador (Gredler, 1992). El estudiante tiende a ser muy competitivo aun en sus juegos socialmente en el patio de la escuela con sus compañeros o en su comunidad.  Para ellos la mejor manera en su ejecución académica es utilizar la estrategia del juego.  El autor les proporciona a sus estudiantes programas interactivos de juegos educativos.  La mayoría de los estudiantes del autor tienen deficiencia en las tablas de multiplicar.  El autor utiliza un programa llamado Academic Skill Builders que tiene cinco diferentes juegos para reforzar las tablas de multiplicar.  Entre estos, hay juego de carrera de autor, ataques de naves espaciales, carrera de pingüinos y caídas de meteoritos.  Para ellos suele ser divertidos y retante pues cuanto más dominen las tablas de multiplicar, más puntuaciones logran acumular.
            Según Jonnasen (2004) hay cinco criterios en el diseño del juego, primero, el ganador debe mostrar conocimientos o habilidades, y segundo, el juego debe abordar conceptos o contenidos importantes.  Tercero, la dinámica del juego debe realizarse según la edad y el nivel de desarrollo de los jugadores (p.572).  Los juegos académicos pueden tener distintos propósitos:  (a) la práctica ayuda a desarrollar habilidades, (b) poder identificar las deficiencias o debilidades en el conocimiento académico, (c) para servir como una revisión de sus tareas, y (d) para desarrollar nuevas relaciones entre conceptos y principios.  El juego también puede ser utilizado para premiar a los estudiantes por trabajar duro, así ofrecerle un cambio de ritmo en el aula.
            De la misma manera los simuladores proporcionan un ambiente favorable para los estudiantes con problemas de aprendizaje pues les permite desarrollar destrezas de vida independiente.  Por ejemplo, ir de compras al supermercado.  El equipo simulador presenta una tienda de dos pasillos con cinco diferentes plantillas.  Los participantes utilizan un joystick para navegar por los pasillos y elementos seleccionados en su lista (Standen y Cromby, 1996).  Cuando se les brindan las herramientas y luego ponen en función lo aprendido en un escenario real, los estudiantes con discapacidad tienden a tener más éxito en el momento de la aplicación.

Integración del aprendizaje Online, Híbrido y Colaborativo
            El autor realiza un análisis sobre el tema Integración del Aprendizaje Online, Híbrido y Colaborativo utilizando como marco de referencia El Informe sobre Educación Superior 2014 de NMC (Horizon Report: 2014 Higher Education Edición, en inglés).  En estos últimos años el avance tecnológico sigue en aumento ante tantas personas que portan entre los equipos más utilizados, un celular inteligente, tabletas o computadoras.  No se puede descartar que ocurra en un compartir familiar o amistades el tiempo dedicado a navegar desde el celular.  Ante esto debemos sacar provecho como educadores a implantar como estrategia de enseñanza la tecnológica.  Un creciente número de universidades está incorporando programas en línea en cursos de todas las facultades, lo que hace que el contenido sea más dinámico, flexible y accesible a un mayor número de estudiantes.  Esta configuración de aprendizaje híbrido está involucrando a los estudiantes en actividades de aprendizaje creativo, que a menudo exige mayor colaboración grupal que en los cursos tradicionales.  El autor ha sido parte del programa hibrido a distancia en sus estudios a nivel graduado y doctoral.  Se reconoce esta alternativa de estudio para hacer buen uso del tiempo manteniendo un aprendizaje efectivo y comunicativo.  El autor reconoce que estos programas permiten desarrollar unas habilidades tecnológicas y un sentido de responsabilidad necesario para el aprendizaje.
            En un comentario para The Chronicle of Higher Education, David Helfand (1995), uno de los fundadores de la Universidad Quest en Canadá, propone un escenario para una mayor colaboración en el aprendizaje del siglo XXI.  En una era donde las herramientas multitareas son algo natural y los medios de comunicación son cada vez más eficientes.  Helfand sostiene que es responsabilidad de la Universidad fomentar habilidades de colaboración entre los estudiantes para que estén mejor preparados al enfrentar los problemas del mundo globalizado.  Muchos educadores están descubriendo que las plataformas en línea pueden ser utilizadas para facilitar la resolución de problemas en grupo, y desarrollar habilidades comunicativas mientras se incrementa el conocimiento de los estudiantes.  El autor considera que la interacción social se desarrolla indirectamente desde el aprendizaje a distancia.  Esto debido a la comunicación que se mantiene entre compañeros sea para aportar o clarificar dudas.  Recientemente, el autor realizó una presentación a este curso con otra compañera.  El autor necesitó reunirse de manera presencial con la compañera para poder coordinar la presentación.  Mantuvo comunicación vía telefónica, correo electrónico y desde la plataforma blackboard.  Nos compartimos el contenido desde distintos medios manteniendo una revisión del texto y cumpliendo con los criterios de evaluación requeridos en el curso en línea.
            La Universidad de Texas, por ejemplo, puso en marcha una iniciativa (2013) para incorporar nuevas tecnologías en cursos introductorios de historia, cálculo, estadística, política y literatura clásica con el fin de establecer un modelo híbrido para acrecentar el interés de los estudiantes.  Basándose en el incremento de las tasas de permanencia entre los estudiantes de primer año en los últimos tres años, así como importantes mejoras en sus notas, asistencia y tasas de aprobación.  Las becas de tres años por valor de $50.000 serán abonadas a cada departamento para apoyar el desarrollo de los contenidos en línea, como módulos de video y herramientas que promuevan la discusión en el marco de la clase.  Debemos destacar la importancia de contar con un programa tecnológico que tengas las herramientas para su mejor funcionamiento.  Los estudiantes buscan organizaciones educativas que cumplan con los parámetros tecnológicos para mejorar el aprendizaje.  El autor consideró a Nova Southeastern University como la mejor opción para completar sus estudios doctorales pues eligió la especialidad en tecnología instruccional y vinculó esta selección con las facilidades del campus.  Si hubiese ocurrido lo contrario había descartado esta Universidad como centro de estudio doctoral pues el ofrecimiento tiene que ir a la par con las facilidades brindadas al estudiantado.

Referencias
Cromby, J. J., Standen, P. J., & Brown, D. J. (1996). The potentials of virtual environments in the education and training of people with learning disabilities. Journal of Intellectual Disability Research, 40(6), 489-501. doi:10.1046/j.1365-2788.1996.805805.x
Feenberg, A. (1990). The Ambivalence of Technology. Sociological Perspectives, 33(1), 35-50.  doi:10.2307/1388976
Gredler, G. R. (1992). The ‘Age of Entry’ Debate in Early Childhood Education. The Review of Education, 14(3), 259-265. doi:10.1080/0098559920140308
Helfand, D. P. (1995). Career change: Everything you need to know to meet new challenges and take control of your career. Lincolnwood, IL: VGM Career Horizons.
Holmberg, B. (1989). Theory and practice of distance education. London: Routledge.
Jonassen, D. H. (2004). Handbook of research on educational communications and technology. Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum.
Keegan, D. J. (1980). On defining distance education. Distance Education, 1(1), 13-36.
doi:10.1080/0158791800010102
NMC Horizon Report: Edición Educación Superior (2014). Impresión 3D. Recuperado en http://www.puce.edu.ec/documentos/pucevirtual/2014-Horizon-Report.pdf.
Tu, C., & Mcisaac, M. (2002). The Relationship of Social Presence and Interaction in Online Classes. American Journal of Distance Education, 16(3), 131-150. doi:10.1207/s15389286ajde1603_2

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